Pensando en lo mucho que ha cambiado mi vida en los últimos 6 años desde que abrí El Chocobuda, me percaté de que todo lo que me ha pasado ha seguido un método estricto.

Los cambios y hacks duraderos que he hecho han llegado cuando llevo al pie de la letra 4 pasos básicos. De no hacerlo, fracaso de manera irremediable.

Si me has estado leyendo, sabrás que soy un total convencido de que la disciplina es necesaria para el desarrollo personal. Cuando andamos por el mundo sin un sistema, ya sea de productividad, de nutrición, de sueño, de aprendizaje o de trabajo; sólo hacemos eso: andamos por el mundo gastando recursos y ocupando espacio.

Por eso es que me decidí a compartir mi pequeño método. Sé que es rudimentario y elemental, pero me ha funcionado.

Espero que lo encuentres de utilidad y lo modifiques para que se ajuste a tu vida.

1. Encuentra lo que quieras cambiar o aprender

Es impresionante cuántas personas son infelices porque no saben qué es lo que necesitan para estar bien. Y lo peor es que muchos saben lo que quieren, pero no son capaces de reconocerlo.

Saber ver a través del ego y el orgullo es un arte que puede tomar mucho tiempo para dominar, pero todo comienza cuando aceptamos que necesitamos cambiar algo. Puede ser desde levantarse temprano, leer más, comer mejor, aprender un nuevo idioma o desarrollar un nuevo hábito.

Reconocer que un cambio es necesario es el primer paso para cambiar tu vida y crecer.

2. Investiga y lee

Uno de los motivantes más fuertes que tenemos es el ejemplo. Cuando alguien cercano logra un cambio, nos inspira para hacer lo mismo. Si somos aventureros preguntamos cómo hizo y trataremos de emular para llegar a un resultado similar.

El problema es que casi siempre nos quedamos a nivel de plática informal.

Para comenzar un cambio importante, no hay más que documentarse y lo más seguro es que haya alguien que tenga un sistema probado y que puedas seguir al pie de la letra.

¿Quieres aprender a comer mejor? Busca libros de nutrición. Acércate a un experto. Participa en foros donde hayan personas con el mismo interés.

¿Necesitas adoptar un método de productividad? Lee libros. Suscríbete a blogs especializados. Ponte en contacto con alguien que te inspire.

¿Te apasiona la ventriloquía? ¿Quieres tocar guitarra? ¿Cocinar comida china? Lee libros relacionados con el tema que busques.

Por si no te has dado cuenta, la palabra recurrente es… LIBROS. Sí, esas colecciones de hojas con símbolos que cargan los hipsters a todos lados.

No tengas miedo. Los libros no te harán daño.

Un cambio que perdure en tu vida necesita un respaldo de información. Si no lees al menos 2 libros, no llegarás a ningún lado porque no tendrás los cimientos necesarios.

3. Empieza

Ya leíste 10 libros sobre macramé. Eres el experto número uno de tu país en lo que a ensaladas se refiere. Derrotas a todo mundo en los debates sobre los cuatro compases básicos de la guitarra.

Pero todo ese conocimiento no te sirve de nada si no comienzas.

No hay mucha ciencia ni discusión.

Comienza.

4. No pares

El arranque es lo más difícil. Si te documentaste bien, comenzarás a recibir los frutos casi de inmediato.

Y esa es la mejor motivación para seguir.

Ya comenzaste. Ahora no pares. No hay pausas, no hay pretextos. No pares hasta que el cambio sea parte de tu cotidiano.

El fracaso

Por supuesto, mi pequeño método para el cambio puede que no funcione del todo. Quizá tocar la guitarra no era lo que te imaginabas porque tu oído es tan afinado como el de una roca.

Es posible que hayas encontrado que tejer no se lleva bien con tus dedos de salchicha.

Si tu intento de cambio no resultó, no importa. Lo que sí importa (y mucho) es que te diste el tiempo de intentarlo. Ahora tienes ya al menos dos libros en tu haber sobre un tema nuevo. Y la cultura siempre es la mejor inversión.

En mi humilde opinión, tiene más mérito alguien que intenta el cambio, que alguien que se queda sentado viendo la televisión.

Y tú, ¿cómo has logrado el cambio? ¿Has seguido algún método? ¡Compártelo con todos!