A veces la vida se pone tan intensa y muy difícil. Todos buscamos ser felices, pero en los últimos años los índices de infelicidad se han intensificado. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México, hasta 2021, más del 50% de las personas sufren de ansiedad y una quinta parte padecen depresión.
En el resto del mundo, los marcadores de infelicidad han aumentado de manera considerable.
Esto significa que lo que sea que estamos haciendo para ser felices, no está funcionando. Necesitamos una puerta de escape, algo que nos ayude a mejorar nuestra relación con la vida. Es cuando muchos comienzan a mirar con otros ojos la espiritualidad.
No es que la espiritualidad sea la extinción de los problemas, esos siempre van a estar. Pero la práctica espiritual nos da un punto de vista fresco sobre nosotros mismos, un marco filosófico para llevar nuestra experiencia y valores para salir del sufrimiento.
Y así es como muchos llegamos a investigar sobre Budismo y a considerar abrazar las enseñanzas del Buda.
Existen muchas razones por las que llegamos a la práctica budista. Algunas personas se sienten atraídas por la filosofía, mientras que otras buscan un camino espiritual o una práctica para mejorar su bienestar mental y físico.
Sin embargo, una de las principales razones para convertirse al budismo es la búsqueda de un significado y propósito en la vida.
Todos los seres vivos sufren
El budismo, sin importar la tradición, nos enseña que todos los seres humanos sufrimos. Todos tenemos dudas existenciales y huecos que no han sido atendidos, y que nos producen dolor y confusión.
El budismo comienza dando un diagnóstico de nuestra insatisfactoriedad, pero nos brinda el medicamento para salir del sufrimiento. Al convertirse al budismo, los practicantes pueden aprender cómo vivir una vida más significativa y con un propósito claro; en lugar de ir por la vida sin rumbo.
Otra razón para convertirse al budismo es que la práctica constante y disciplinada de las enseñanzas nos da paz y tranquilidad mental.
Compasión y meditación para transformar tu vida
Las tradiciones budistas se cimentan en el hábito de la meditación; tecnología espiritual eficaz para superar la ansiedad, el estrés y la depresión. Además, enseña la importancia de desarrollar una mente equilibrada y a controlar los pensamientos con los que nos causamos daño.
De igual importancia, es la práctica de la compasión como motivo de vida, lo que lleva a las personas a transformar su relación con el universo ya disminuir las crisis existenciales. El budismo enseña que todos los seres vivos merecen ser tratados con compasión y respeto, y que es importante ayudar a los demás y trabajar por el bien común.
Las razones para convertirse al budismo son variadas y personales. Puede ser una búsqueda de significado y propósito en la vida, de paz y tranquilidad mental, o de compasión y bondad. Al convertirse al budismo, uno puede aprender a vivir una vida más consciente y significativa, y mejorar su bienestar físico y mental.
La vía del Zen
De entre todas las tradiciones budistas, la escuela Zen japonesa es una de las más enigmáticas pero que brinda muchas herramientas para la vida cotidiana. Practicar Zen es ser capaces de aceptar la vida tal y como es, para poder encontrar belleza y paz aún en las pruebas más difíciles de nuestra experiencia.
Un practicante de Zen entiende que la felicidad siempre está en nuestras manos. Vivimos con humildad, gratitud, compasión y somos generosos con el universo.
Si quieres dar tus primeros pasos en el budismo, nuestro Curso de Introducción al Budismo Zen 1, está por comenzar.