Introducción al Maha-mangala Sutra: Las Bendiciones

Shakyamuni Buda a menudo compartía sus profundas enseñanzas a través de sutras o discursos. Uno de los sutras más venerados, aunque poco conocido en occidente es el Maha-mangala Sutta, parte del canon Pali, que detalla las mayores bendiciones para llevar una vida plena y virtuosa.

Algunas traducciones de este sutra usan la palabra “protecciones”, en lugar de bendiciones. Esto es debido a que la práctica budista, cuando es llevada al pie de la letra, nos protege de las cosas dolorosas de la vida.

Este sutra es importante porque nos habla sobre los verdaderos caminos hacia la felicidad duradera. En un diálogo poético, un ser celestial le pregunta al Buda cuál es la mayor bendición tras observar que muchos seres buscan el bien supremo. La respuesta del Iluminado es una guía práctica e inspiradora.

Shakya-sama enfatiza que las mayores bendiciones surgen de la sabia asociación, el respeto por lo digno, la residencia apropiada, las acciones meritorias pasadas y encaminarse en el sendero correcto del Dharma. Acumular conocimiento, desarrollar habilidades útiles, mantener una disciplina virtuosa y el habla refinada también se consideran grandes bendiciones.

Además, el Buda resalta las bendiciones del apoyo familiar, la ocupación pacífica, la generosidad, la conducta recta, la abstención de lo nocivo, el autocontrol y el no-abuso de la vida sexual. La humildad, el contentamiento, el aprendizaje del Dharma y la asociación con maestros budistas más sabios que nosotros, también se consideran bendiciones supremas.

Por último, el Buda declara que la mayor bendición de todas es la realización de la liberación a través de la comprensión de las Nobles Verdades y el Nirvana. Una mente serena e imperturbable, libre del sufrimiento, la contaminación y el temor es la culminación de todas las bendiciones. Es decir, solo el entrenamiento de la mente nos libera de los venenos que creamos con los pensamientos sin control.

Al estudiar y contemplar este hermoso sutra, nos conectamos con la sabia guía del Buda para vivir una vida plena de virtud, compasión y comprensión. Puede que no te interese el budismo, pero este sutra es tan práctico y aterrizado, que resulta una guía útil para la vida cotidiana.

Hoy te presento este sutra. Es corto pero lleno de sabiduría. Espero te sea útil.

Maha-mangala Sutra

Así he oído. En una ocasión el Bienaventurado residía en el monasterio de Anathapindika, en el Bosque de Jeta, cerca de Savatthi. Ahora, cuando la noche estaba muy avanzada, una cierta deidad cuyo espléndido resplandor iluminaba todo el Bosque de Jeta, se acercó a la presencia del Bienaventurado y, acercándose respetuosamente, lo saludó y permaneció a un lado. Estando así, se dirigió al Bienaventurado en verso:

«Muchas deidades y hombres, anhelando el bien, han reflexionado sobre las bendiciones. ¡Por favor, dime cuál es la mayor bendición!»

El Buda respondió:

No asociarse con los tontos, sino asociarse con los sabios; y honrar a quienes son dignos de honor; esta es la mayor bendición.

Residir en un lugar digno y ordenado, haber realizado acciones meritorias en el pasado y encaminarse en el Sendero Correcto; esta es la mayor bendición.

Tener mucho aprendizaje, ser compasivo en todo lo que se haga, estar bien entrenado en la disciplina y hacer uso racional del lenguaje; esta es la mayor bendición.

Cuidar de la madre y al padre, apreciar a la pareja e hijos, y dedicarse a una ocupación honesta y pacífica; esta es la mayor bendición.

Ser generoso en el dar, ser recto en la conducta, ayudar a los parientes y ser intachable en la acción; esta es la mayor bendición.

Alejarse el mal y abstenerse de él, abstenerse de los intoxicantes y ser firme en la virtud; esta es la mayor bendición.

Ser respetuoso, humilde, contento y agradecido; y estudiar el Dharma; esta es la mayor bendición.

Ser paciente y obediente, asociarse con monjes y tener discusiones religiosas en las debidas ocasiones; esta es la mayor bendición.

El autocontrol y meditación, una vida de paz y sin obsesiones, la percepción de las Nobles Verdades y la realización del Nirvana; esta es la mayor bendición.

Una mente no perturbada por los caprichos de la fortuna, liberada del sufrimiento, purificada de las impurezas, liberada del temor; esta es la mayor bendición.

Aquellos que así viven, permanecen siempre invencibles, establecidos en la felicidad. Estas son las mayores bendiciones.