Aborto y Budismo Zen

Aborto y Budismo Zen

Uno de los temas candentes para la sociedad siempre ha sido el aborto. Todo mundo tiene opiniones tan fuertes, que generan división y odio. A la mitad de 2018 parecería que hay más intercambios de juicios que nunca. No creo que sea coincidencia que varias personas me hayan escrito con la misma pregunta esta semana:

¿Qué opina el budismo sobre el aborto?

Antes de hablar sobre la postura del Zen, hay que mencionar que tradicionalmente el aborto estaba mal visto en el budismo en general.

En el Canon Pali (las supuestas enseñanzas intactas de Shakyamuni Buda, preservadas por los monjes Theravada), la interrupción del embarazo era condenada.

En el Vinaya, las reglas de conducta para los monjes dejadas por Shakya-sama, se prohíbe estrictamente que los monjes ayuden o ejecuten abortos.

Para el recién llegado al budismo, parecería que la postura oficial sería un rotundo NO al aborto. Pero ambas ideas mencionadas tienen quizá más de 2,000 años de antigüedad. Fueron dejadas para otras culturas, en otro tiempo y en otras circunstancias. En un mundo en el que los niños morían de gripe, infecciones de dientes y simples fiebres; en donde la expectativa de vida era hasta los 45 o 50 años;  la humanidad dependía de fabricar la mayor cantidad de bebés posibles para garantizar la continuidad de la especie.

Hace 2,000 años, en las sociedades asiáticas el machismo y las divisiones de castas era mucho peor de lo que son ahora. Los hombres imponían su juicio de acuerdo a rango social, disminuyendo la presencia y campo de acción de la mujer.

Me parecería que lo anterior también aplica para las ideas anti-aborto de las religiones abrahámicas, pero no sé en realidad. No soy experto en ellas.

Ahora, es cierto que en el budismo vivimos para cuidar la vida en todos los aspectos, pero también es cierto que los practicantes deben tener criterio suficiente para no caer en el fundamentalismo y hacer lo posible para conservar los Preceptos; al mismo tiempo que se debe jugar con las reglas de la sociedad. El mismo Buda adaptaba el Dharma de acuerdo a la persona que lo recibía. El practicante de budismo necesita entender esto para que el Dharma siga adelante.

En los libros y textos budistas clásicos, casi todas las posturas budistas sobre el aborto que podemos encontrar, son arcaicas, han envejecido muy mal. Tienen un gran valor histórico para el estudioso, pero no pueden ser aplicadas a las sociedades contemporáneas; y mucho menos a las culturas occidentales.

Tomando todo lo anterior en cuenta, al día de hoy, en pleno 2018, la postura budista es diferente. Más aún la postura del Zen.

El aborto desde el punto de vista del Budismo Zen

Hay que considerar los siguientes puntos de la práctica Zen:

  • Miramos el asunto como especie, dejando de lado las opiniones personales y el ego.
  • Desechamos todo tipo de ética y moral abrahámicas. La historia demuestra que no funcionan.
  • Vivimos por el camino del Bodhisattva: ayudamos a  todos los seres vivos a salir del sufrimiento.
  • Entendemos que el Dharma ha sobrevivido al paso de los años y ha sido transportado a tantas culturas, gracias a su enorme capacidad de adaptación.
  • Estos son tiempos en los que luchamos por que la equidad, el respeto y la cordura se mantengan. A la paz se llega por medio de la Gratitud, Compasión y Generosidad.
  • No hay tal cosa como «hombres y mujeres». Todos somos personas bajo los mismos derechos y condiciones. Nadie es superior a nadie.
  • Entendemos que las opiniones están fundamentadas en autoengaño y fantasías. Son ficción pura. Entonces, nadie puede forzar a una sociedad a que su opinión sea «oficial». ¿Cómo se puede forzar algo ficticio?
  • Los tiempos de fabricar bebés en masa han quedado atrás. Necesitamos ser menos personas, no lo contrario.

En Japón muchos templos budistas prestan apoyo espiritual a la mujer que necesita abortar. Por parte de los monjes no hay juicio, preguntas, críticas o comentario alguno; simplemente se ayuda. Y es que en Japón el aborto es permitido legalmente en si éste pone en riesgo la salud de la madre y el feto; si la madre no tiene los medios económicos; y (aunque aún no está en sus leyes) como método anticonceptivo.

La figura del Bodhisattva Jizo es usada en los templos para dar confort y guía a la mujer.

Entonces, el practicante de Zen guarda silencio y suelta el ego. Manda las opiniones personales, juicios y legislaciones a la basura. No cuestiona, solo acepta. La única persona que tiene capacidad y libertad de decisión es la mujer. Todo lo que se salga de este concepto es solo un estorbo para la sociedad.

Nuestro papel como practicantes del Dharma es callar, ayudar y dar apoyo espiritual a todos los seres.

 

 

Budismo Soto Zen para Principiantes. Episodio 3. La historia del Buda 1

La vida de Siddhartha Gautama ha sido contada miles de veces en todas las culturas, en todos los tiempos. Pero el ser humano tiende a olvidar fácilmente, así que es necesario mantener esta historia viva para que siga inspirándonos.

En este episodio hablamos detalles importantes de la vida de quien se convertiría en uno de los maestros espirituales más grandes de la humanidad.

 

Presentación: Grupo Zen Ryokan, tu sangha siempre disponible y en todo el mundo

Presentación: Grupo Zen Ryokan, tu sangha siempre disponible y en todo el mundo

 

El Chocobuda ha sido un proyecto interesante porque comenzó de cero absoluto. Al principio estaba yo solo. Solía ser mi bitácora personal donde registraba mis experimentos en minimalismo y la Vía del Budismo Zen. A lo largo de más de 10 años muchísimos amigos han seguido el blog, los videos y los audios; y se han unido a los talleres que impartimos. Con el tiempo me ordené como monje y luego mi Maestro decidió otorgarme la Transmisión del Dharma. Ustedes siempre me han acompañado y jamás, jamás me he sentido solo o aislado. Mi práctica siempre ha sido y será  para ustedes.

En verdad que las palabras no son suficientes para expresar mi gratitud y la humildad por la generosidad, confianza y amor que me han dado.

Y precisamente porque no tengo las palabras precisas, sino acciones, les presento oficialmente al Grupo Zen Ryokan.

Somos una sangha (comunidad de practicantes de Budismo) de personas interesadas en la práctica Zen. Nuestro zendo está en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, pero gracias a la tecnología llevamos el Budismo Soto Zen en español a todo el planeta. Es una sangha diseñada para quienes no tienen un centro Zen cerca, para personas con problemas de movilidad o salud; y para gente muy ocupada que solo dispone de unos minutos libres del día para su práctica espiritual.

Juntos aprendemos de las enseñanzas del Buda, Dogen Zenji, Nishijima Roshi y todos los Patriarcas. Juntos crecemos. Juntos guardamos silencio y practicamos Zazen, sin importar el lugar o el tiempo. Entendemos que el Zen abarca todos los aspectos de la vida y no se puede quedar encerrado en cuatro paredes. ¡La vida entera es nuestro templo!

Puedes visitar nuestro sitio oficial aquí.

Para leer la presentación, haz clic aquí.

Si te interesa practicar juntos y rodearte de amigos en muchos países de habla hispana, regístrate en nuestra comunidad en línea. Estamos comenzando, pero en el futuro tendremos grupos de estudio formal, club de lectura, club de cine y actividades colectivas de compasión.

Para unirte a la sangha da clic aquí.

¿Hasta dónde llegará esta etapa? Eso lo deciden ustedes. Caminemos juntos. Aprendamos Budismo Zen para que la vida sea un lugar más equilibrado para nosotros y todos los seres vivos.

Gracias por haberme traído hasta aquí. Amituofo _/|\_

Budismo Soto Zen para Principiantes. Episodio 2. Shikantaza

Para el Budismo Zen no hay una práctica más perfecta y pura que el Zazen. Nos sentamos en meditación con espalda recta, piernas cruzadas, ojos entreabiertos; para simplemente dejar que la vida sea lo que necesita ser. Observamos cómo los pensamientos, deseos y aversiones surgen; cómo quieren tomar el control; y los dejamos ir.

Sin embargo el ser humano, y aún más los occidentales, estamos secuestrados por el terrorista más grande; nuestro propio ego.

Para vencerlo se requiere determinación y disciplina. Practicamos Zazen sin preguntar, sin negociar y sin cuestionar; porque sabemos que no hay otra manera de vivir el Buddhadharma más que en la amplitud cósmica del zafu. Eso es Shikantaza.

En Shikantaza contemplamos la vida, nuestros pensamientos, detenemos las urgencias y todas las búsquedas. Llegamos a la inmovilidad de cuerpo y mente, unidos con el flujo del universo.

En este segundo episodio damos una introducción breve a la filosofía detrás de Shikantaza.

 

A veces es verano

A veces es verano

 

El otro día pasé por un maizal.

El campo pintaba ese momento de color verde por las hojas que se nutrían de sol. La humedad de la tierra sostenía los tallos con firmeza y, al mismo tiempo contaban la historia de millones de seres que dieron su vida para que la vida siga adelante.

Cada grano de maíz en crecimiento anunciaban infinitas posibilidades para construir presentes y para nutrir otros seres; que nutren a otros seres.

Este campo es el punto más alto de la evolución de todos los universos, en un instante que ahora es solo recuerdo.

Mi silencio fue roto por un agradecido llanto.

A veces es verano.

Caligrafía de Lore.