Creatividad para la vida cotidiana

—Mamá, ¿porqué no intentas agregar un poco de vinagre a la sopa? Con una cucharada es suficiente. Yo lo he hecho y mejora el sabor, además de que extrae más minerales de los ingredientes.

—No. Así siempre la hemos hecho en la familia. Tu abuela no era tonta.

He escuchado discusiones de este tipo muchas veces a lo largo de mi vida, en diferentes familias.

En cuestión de aprendizaje, la experiencia de crecer en este mundo es peculiar, por decir lo menos.

Nacemos, vamos a la escuela, aprendemos todo lo que se necesita y poco a poco vamos experimentando cómo se resuelven los problemas de la vida.

Probamos un método o sistema, y si funciona, lo adoptamos para el resto de nuestros días. Quizá con algo de tiempo podemos modificar lo aprendido para ser más eficientes pero, ¿cuántos de nosotros estamos realmente interesados en cambiar los sistemas aprendidos?

La triste realidad es que muy pocas personas están dispuestas a salir de la comodidad para modificar lo que ya funciona. ¿Para qué esforzarse?

Uno de los factores que más disfruto de la vida es la asombrosa capacidad que tenemos para cambiar el medio ambiente. De hecho, uno de los motores más grandes para el crecimiento humano es la incomodidad.

Si hay algo que no nos gusta, luchamos por cambiarlo a como de lugar. Pero cuando las cosas ya están bien, regresamos a la comodidad y la búsqueda termina.

ACLARO: No tiene nada de malo aceptar las cosas como son. La aceptación es un valor budista importantísimo y necesitamos cultivarlo diario. Ésto no significa que debamos rendirnos y esperar la muerte. No. Se trata de reconocer el estado actual de las cosas y usarlo como cimiento para construir una mejorar vida para el beneficio propio y de las personas que nos rodean.

Y aquí es donde entra el impulso creativo humano.

La creatividad es la habilidad de buscar soluciones inteligentes e innovadoras para un problema dado.

Ya sea un proyecto artístico, matemático, culinario o de placer, la creatividad es una expresión natural para nosotros.

Claro que esto todo mundo lo sabe. Admiramos a las personas creativas y todo el tiempo estamos consumiendo ideas que producen otros.

Si es tan importante y tan humana, ¿entonces porqué evitamos ser creativos?

Por ego.

El ego, siempre gordo y amante de la comodidad, es el que nos impulsa a sentarnos quietos sin cambiar las cosas. Es el que nos hace sentir bien con lo establecido y evita todo tipo de esfuerzo para mejorar. Si no ponemos atención al ego y lo controlamos, nos volvemos apáticos y veremos a los creativos como enemigos.

La apatía es una fuerza negativa devastadora porque mata la creatividad; lo cual nos estanca y corta todo tipo de crecimiento personal.

¿Cómo hacer que fluya la creatividad? Existen muchos métodos, pero comparto sólo algunos que me han funcionado:

  • Practicar Mindfulness diario (meditación no necesariamente budista)
  • Preguntar siempre: ¿hay una mejor manera de hacerlo?
  • Imaginar. Sí, imaginar una historia de cómo un super héroe resolvería el problema es divertido, pero también destapa los jugos creativos del cerebro.
  • ¡Experimentar sin miedo!

El último punto será explicado con más detalle en próximos posts. Gracias a que perdí el miedo a la experimentación he hecho cambios importantes en cosas tan simples como afeitarme mejor. Suena tonto, pero ésto me ha generado ahorro y piel sin cicatrices.

¿Cómo aplicas la creatividad a tu vida cotidiana?

Si quieres aprender más sobre creatividad y mindfulness, te invito a Omoi, el nuevo taller de mindfulness para creativos. Clic aquí.

5 hábitos positivos y de compasión para 2015

5 hábitos positivos y de compasión para 2015

La temporada de año nuevo siempre nos hace imaginar lo maravillosa que sería la vida si tan sólo pudiéremos cumplir nuestros propósitos. Algunos hacemos grandes listas con los cambios a efectuar, los saboreamos, competimos contra nuestros amigos y familia, nos prometemos que esta vez sí lo lograremos. ¡Es muy divertido! Al final de cuentas, volverse corredor es fácil, ¿correcto?

Luego de ese tornado de buenos deseos y planes, pasan las primeras semanas del año y la vida sigue inmóvil. Nada ha cambiado. Tiramos nuestros propósitos a la basura y decidimos esperar al siguiente enero para comenzar de nuevo con el ciclo.

Para muchos, ésto no es de cuidado. Si formulamos propósitos y no se cumplen, no pasa nada. Pero es todo lo contrario; fallar una y otra vez en nuestros propósitos tiene un costo muy alto en auto estima y en el concepto personal. Con el paso del tiempo nos volvemos apáticos, desesperanzados y conformistas.

Hay muchas razones por las que fallamos y están documentadas, pero existe un factor que todos pasamos por alto:

Fallamos porque todos los propósitos de año nuevo obedecen a motivos egoístas.

Todos los propósitos contienen la palabra YO de alguna manera. Quiero lograr/ganar/comer/mejorar/alcanzar… para mi y nadie más.

Cuando hacemos de nuestra vida un ejercicio de ego, nos ponemos muy cerca de la puerta del sufrimiento y de la apatía. Nos recluimos en nosotros mismos y dejamos de ver las conexiones que tenemos con la humanidad. Nos volvemos ingratos y, en general, personas poco gratas.

Entonces pregunto, ¿qué pasaría si tus propósitos sacan al ego de la ecuación? ¿Qué pasaría si tus metas para año nuevo se enfocan en mejorar y ayudar a los demás?

La respuesta a esas preguntas sólo las podrás entender cuando pongas manos a la obra. Lo que sí puedo decir es que la felicidad llega cuando abres el corazón y trabajas para los demás, sin pretender nada a cambio.

Altruismo, compasión, gratitud y generosidad son las características que necesitamos cultivar.

Al poner de lado tus intenciones egoístas, la vida mejora y poco a poco comienzan a llegar cambios positivos a tu vida.

Pero no me creas a mi, que no soy nadie. Sólo escribo cosas producto de la cafeína. Pon a prueba lo que digo. Te reto a que me desmientas practicando estos 5 hábitos positivos y de compasión para 2015:

  1. Pregúntale su nombre. Estamos rodeados de personas todo el tiempo. Algunas trabajan para ti y nunca has reconocido su labor, ni haz saludado siquiera. Este es un buen año para saludar, sonreír y aprender el nombre del barista, recepcionista, mesero, conductor. Verás que las puertas de la amistad se abren.
  2. Cuida tu cuerpo. Lo he dicho mil veces y lo seguiré diciendo: si tratas tu cuerpo como basurero, te responderá como basurero. Aprende de nutrición, olvida la comida de fábrica y sal a caminar. Si tu cuerpomente están limpios, le eres útil a la humanidad. La compasión comienza con uno mismo.
  3. No olvides a tus viejos. Padres, tíos o abuelos; todos tenemos familia en edad avanzada. Llámales, visítalos, ayuda, sal con ellos. Quizá para ti es una carga, pero para ellos es felicidad.
  4. Busca una causa. Pasamos el día en un escritorio preocupándonos por lo que sea. Es hora de tomar acción y encontrar una causa noble para colaborar. Créeme, es una muy buena manera de terminar con la angustia y crecer como persona.
  5. Lee libros. La ignorancia es muy costosa para la humanidad. Lee libros, sin ilustraciones y que no sean para colorear. Lee literatura para abrir tu mente. Lee superación personal para crecer. Lee para divertirte. Pero lee. Y cuando te canses, lee más.

Al escribir este post me doy cuenta de lo pequeña que es la lista de hábitos y lo mucho que hay por hacer en cuestión de compasión.

Pero si al menos uno de tus propósitos de año nuevo se apega a la compasión y generosidad, estarás colaborando con la humanidad, con tu felicidad y a cumplir la más noble de las metas: ayudar a todos los seres vivos a salir del sufrimiento.

Para aprender más sobre hábitos y cómo hacerlos permanentes, ven a Shojiki, el taller en el que la meditación es la espina dorsal del cambio.

Diez razones por las que fallan tus hábitos

Sigo con el tema de nuevos hábitos y pensando en el gran daño que la cultura de la recompensa inmediata ha causado.

Esto genera una avalancha de obstáculos que nos hacen fallar de maneras épicas al momento de querer mejorar nuestra experiencia de vida.

La sociedad parece aplaudirnos cuando alguien come mal por estar muy ocupado, dormir poco por dedicar tiempo a las fiestas, despertar tarde en fin de semana, o al empeñar el futuro con deudas de tarjetas de crédito.

Y ni qué decir de la mercadotecnia. Nos vende la fantasía de que con una píldora mágica/gadget/bebida/amuleto dormiremos mejor, bajaremos de peso o tendremos más energía.

Sin embargo, lo que todo mundo se esfuerza en ignorar es el hecho de que los nuevos hábitos se apoyan en la disciplina. No hay más.

No existen los milagros, la magia, la providencia, ni El Secreto. Sólo existe el trabajo, la dedicación y la constancia.

Para evitar el desarrollo de nuevos hábitos existe una gran colección de obstáculos, casi todos basados en nuestro gran y pesado ego. Aquí presento una pequeña lista:

  1. Pereza. Cuando decides no comenzar, lo cual es la madre de todas las fallas.
  2. Auto complacencia. «Sólo 10 minutos más», «Una galleta más no me dañará», «Sólo robaré esto y no lo haré más». Cuando el ego se monta en nuestros hombros y nos evita pensar para hacer cosas que él quiere, estamos siendo autocomplacientes. Este factor nos hace subir de peso, descuidar el cuerpomente y traicionar personas.
  3. Esperanza en la píldora mágica. La pereza y la autocomplacencia culminan cuando crees que un remedio automático cambiará las cosas sin esforzarte. No hay magia, sólo hay acción y disciplina. Eso es lo que cambia vidas.
  4. Seguir a la manada. La estupidez de grupo es muy peligrosa porque nos hace lanzar pensamientos como «Si todos lo hacen/tienen/bailan/usan, entonces es bueno». Así es como se cancela la razón y eso es lo que menos necesitas.
  5. Apego a las costumbres y tradiciones. Nada de malo seguir tradiciones. Lo peligros es dejar de cuestionarlas o mejorarlas.
  6. Miedo a experimentar. El miedo es una montaña enorme que crece sobre nosotros. Nos inmobiliza y nos vuelve tontos. Hace que dejemos de esforzarnos para crecer.
  7. Miedo al cambio. El cambio genera angustia porque nos hace levantarnos de nuestro trasero para poder actuar. Entre mayor es el miedo, más estancada estará nuestra vida.
  8. Ignorancia / falta de información. No leer y documentarnos sobre lo que queremos hacer cierra la mente y nos ciega ante opciones o soluciones que nos conviene. A diferencia de otras opiniones, creo que la falta de información genera angustia y miedo.
  9. Rebeldía. Cuando nuestra estupidez y ego alcanzan niveles épicos, evitamos cambiar porque «así soy, ¿y qué?». Sobra decir la cantidad de estancamiento que esto produce.
  10. Mala alimentación. Sí, leíste bien. Mala alimentación. A pesar de que la subestimamos, la nutrición es la clave de la vida. Comer alimentos procesados y abusar de las harinas nos vuelve pesados, deprimidos y apáticos. Es mucho más fácil generar hábitos duraderos cuando la nutrición es equilibrada.

¿Te has enfrentado con algún obstáculo fuerte al crear nuevos hábitos? ¡Comparte en los comentarios!

Si quieres aprender sobre hábitos y comenzar 2015 con el pie derecho, ven a Shojiki, el taller de hábitos donde nuestra espina dorsal es la meditación y la constancia.

10 factores que impiden la formación de hábitos

10 factores que impiden la formación de hábitos

Nuestra cultura de la recompensa inmediata ha causado más estragos de los que imaginamos. Y los costos de querer todo aquí y ahora son muy, muy elevados.

A la vez, ésto genera una avalancha de obstáculos que nos hacen fallar de maneras épicas al momento de querer mejorar nuestra experiencia de vida.

La sociedad parece aplaudirnos cuando alguien come mal por estar muy ocupado, dormir poco por dedicar tiempo a las fiestas, despertar tarde en fin de semana, o al empeñar el futuro con deudas de tarjetas de crédito.

Y ni qué decir de la mercadotecnia. Nos vende la fantasía de que con una píldora mágica/gadget/bebida/amuleto dormiremos mejor, bajaremos de peso o tendremos más energía.

Sin embargo, lo que todo mundo se esfuerza en ignorar es el hecho de que los nuevos hábitos se apoyan en la disciplina. No hay más.

No existen los milagros, la magia, la providencia, ni El Secreto. Sólo existe el trabajo, la dedicación y la constancia.

Para evitar el desarrollo de nuevos hábitos existe una gran colección de obstáculos, casi todos basados en nuestro gran y pesado ego. Aquí presento una pequeña lista:

  1. Pereza
  2. Auto complacencia
  3. Esperanza en la píldora mágica
  4. Seguir a la manada
  5. Apego a las costumbres y tradiciones
  6. Miedo a experimentar
  7. Miedo al cambio
  8. Ignorancia / falta de información
  9. Rebeldía
  10. Mala alimentación

Sí, el número 10 es la mala alimentación. A pesar de que la subestimamos, la nutrición es la clave de la vida. Comer alimentos procesados y abusar de las harinas nos vuelve pesados y apáticos.

Es mucho más fácil generar hábitos duraderos cuando la nutrición es equilibrada.

¿Te has enfrentado con algún obstáculo fuerte al crear nuevos hábitos? ¡Comparte en los comentarios!

Si quieres un método efectivo para mejorar tus hábitos, ven a Shojiki, el taller de hábitos de Chocobuda.

¡Regresa Shojiki, taller de hábitos 2015!

¡Regresa Shojiki, taller de hábitos 2015!

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Así como 2014 comienza a morir, nuestros planes y energía para el año que viene aumentan día con día. En la mente vamos dibujando planes y propósitos para 2015 y estamos seguros que este año será el bueno.

Desgraciadamente los planes y las buenas intenciones no son suficientes. Es necesario cambiar nuestra mentalidad y tener un método para lograr lo que queremos.

Aquí es donde entre Shojiki, el taller de hábitos de Chocobuda. Éste ha sido nuestro taller más exitoso y muchas personas se han beneficiado de él porque tomamos la meditación como eje principal de la creación de nuevos hábitos.

Una de las acciones más nobles que podemos tomar es la creación de un hábito nuevo. Es el resultado de la irreverencia máxima, de querer tomar el control de nuestra vida, de retar el conocimiento convencional y a nuestros propios demonios.

¿Cuántas veces lo has intentado y fallado?

Forjar un nuevo hábito es emocionante pero sin una guía e inspiración, estamos condenados a repetir los errores.

Existen muchos métodos y enseñanzas para alcanzar este fin, pero casi todos se enfocan en el hábito mismo. No exploran la raíz ni lo que produce el impulso del cambio.

Shojiki es un taller 100% online diseñado por Chocobuda para cultivar un hábito que transforme tu vida, contrarrestando la locura y la prisa de la vida cotidiana.

Sí, leíste bien. Un sólo hábito.

Shojiki es la palabra japonesa que significa sinceridad, buena fe, honestidad, honradez, confiabilidad. Estos son los valores que promueven el cambio y son explorados mediante ejercicios 100% prácticos que impulsan la disciplina necesaria para el cambio.

Shojiki en una mirada

Evento: Shojiki, taller de hábitos

Facilitador: Kyonin

Inicia: Lunes 19 de enero, 2015

Disponibilidad: Limitada

Cierre de inscripciones: 15 de enero, 2015

Más información: elchocobuda ARROBA gmail.com

Más información
Aprender cosas nuevas te hace feliz (parte 2 de 2)

Aprender cosas nuevas te hace feliz (parte 2 de 2)

Esta es la segunda parte de esta mini-serie. Para leer la primara parte, haz clic aquí.

No importa cuánto se quiera ignorar este hecho fundamental de nuestra naturaleza, el ser humano es un animal que se guía por instinto y por sensaciones.

Si algo nos agrada, lo repetimos. No hay más.

Esa es la base de todos los excesos.  Bebemos y comemos por el puro placer de hacerlo, aunque también podemos caer en lugares oscuros que no mencionaré.

Entonces, si lo agradable es adictivo y aprender cosas nuevas es maravilloso, ¿por qué muchos de nosotros no lo repetimos más seguido? Por que el ego se interpone. Como mencioné en el post anterior, el ego es un gordo inmenso que vive encima de nosotros. Con su peso evita que nos movamos, que subamos y que salgamos adelante.

Pero cuando lo podemos vencer y rompemos el esquema de la comodidad, vemos que la vida se pone aun más interesante de lo que estaba.

Aprender es uno de los placeres más grandes que tenemos. Enriquece la vida, alimenta el espíritu y nos da habilidades que podemos utilizar en todos los aspectos de nuestra existencia.

Aquí presento algunas de las ventajas que trae el aprender cosas nuevas:

Nos da un gran sentimiento de aventura

Indiana Jones no es el único que puede descubrir templos perdidos. Nosotros mismos podemos romper esquemas y retar lo establecido cuando nos atrevemos a buscar el conocimiento.

Aprender algo nuevo incrementa el flujo de oxígeno en la sangre y nos hace sentir vivos.

Ayuda a adquirir disciplina

No hay nada malo con estar cómodos y tener una vida llena de pequeños gustos. El problema es cuando se nos olvida que la incomodidad es buena y es el detonante para buscar nuevas formas de comodidad.

Comenzar con lo básico de un nuevo idioma implica trabajo, investigación y práctica. Sólo se logra sacrificando descanso por ir a una academia o dedicar tiempo autodidacta.

Todo esto se reduce a la palabra más temida por todos: disciplina.

Promueve la investigación

La búsqueda por el conocimiento inicia cuando recabas información. Y eso siempre es bueno.

Aunque no llegues a aprender algo al 100%, digamos mandarín, la investigación te dará las bases para conocer aunque sea un poco más de algo.

Así la mente se abre y se expande.

Cuando aprendes algo nuevo, todos ganamos

Al adquirir conocimientos nuevos, le eres más útil al universo. Eso nos beneficia a todos, siempre y cuando se use para actos virtuosos, claro.

¿Yo? Sigo aprendiendo Linux y soy muy feliz con él. Me hace comprender un poco más cómo funcionan las computadoras (ordenadores) y el Internet. Me hace sentir hacker, aunque sólo sea un vil novato que a penas puede abrir Chrome. Es un reto intelectual que trae resultados positivos a mi vida.

¿Qué es lo que más has disfrutado aprender?