Este taller es presencial y por Zoom para nuestros amigos en otras ciudades. Incluye material de estudio descargable.
Taller Gratitud Espiritual. Profundiza tu práctica espiritual con la sabiduría del Budismo Zen.
Fechas: 18, 25 de agosto y 1 de septiembre de 2023. De 19:00h a 20:30h (CDMX).
Lugar: Árbol del Yoga y por Zoom. La información para la transmisión se publicará en el grupo de WhatsApp.
Facilitador: Hondou Kyonin, monje budista Soto Zen.
Costo por sesión: $200.
Costo por todo el taller: $500. – Inscripciones en el correo choco ARROBA budismosotozen.org
Costos fuera de México: escribir para pedir informes.
Informes e inscripciones en: choco ARROBA budismosotozen.org
Todos los días de nuestra vida decimos la palabra “gracias” tantas veces, que se ha convertido en una costumbre vacía. ¿Realmente lo sientes en el corazón?
En un mundo lleno de distracciones y demandas constantes, a veces nos resulta difícil detenernos y reconocer genuinamente las bendiciones que nos rodean. La falta de gratitud sincera puede llevarnos a sentirnos desconectados de la vida misma. Y peor aún, sin gratitud como base de nuestra espiritualidad, es muy difícil encontrar sentido a nuestros esfuerzos.
¿Alguna vez has sentido que las piezas de quién eres parecen estar dispersas y desordenadas? Es posible que la ausencia de gratitud sea la razón. Cuando no cultivamos la gratitud en nuestras vidas, nos volvemos víctimas incapaces de apreciar la paz y la conexión de Todo lo que Es. Como resultado, nos sentimos aislados, como si estuviéramos mirando la vida desde fuera en lugar de sumergirnos en ella.
Pero aquí está la buena noticia: el Budismo Zen, con su sabiduría ancestral y profunda comprensión de la mente humana, ha encontrado una manera de integrar la gratitud en la esencia misma de nuestra espiritualidad. Desde el Buda hasta los Maestros Zen contemporáneos descubrieron cómo nutrir y cultivar la gratitud para que no solo se convierta en un hábito más, sino también en una fuerza transformadora en nuestras vidas.
Para ti que estás buscando profundizar en tu práctica espiritual, te invito al taller Gratitud Espiritual. A lo largo de tres sesiones enriquecedoras, exploraremos la esencia de la gratitud y cómo podemos integrarla de manera auténtica en nuestra vida.
Durante Zazenkai de esta semana habrá un evento de danza en Árbol del Yoga. Habrá mucha gente, música en alto volumen y ruido por todos lados. Cualquiera pensaría que para Zazen se necesita ir a un templo en la montaña, pero es todo lo contrario. El ruido es perfecto.
Con este motivo, el domingo exploraremos juntos un aspecto fundamental de nuestra práctica Zen y cómo abordar los desafíos que la vida nos presenta.
Como saben, la práctica principal del Zen es Shikantaza Zazen. En la vida nos encontramos con momentos de tranquilidad y también con aquellos llenos de ruido, ya sea proveniente del exterior o del interior. La verdadera maestría en el camino Zen radica en nuestra capacidad de aceptación y de adaptación para integrar todas las condiciones de la vida a nuestra práctica.
En Zazen, aprendemos a sentarnos con lo que es, con lo que verdaderamente hay en el momento presente. A menudo, cuando surgen ruidos externos, el ego puede instintivamente pedir a gritos un silencio absoluto. Sin embargo, en lugar de resistir o rechazar estos sonidos, nos desafiamos a nosotros mismos y los abrazamos. Reconocemos que los ruidos, ya sean provenientes del mundo exterior o generados internamente, son Buda.
Nos entrenamos para no juzgar y no comentar, sino a aceptar y contemplar con ecuanimidad. Comprenderemos cómo este enfoque nos ayuda a cultivar una mente clara y despierta, incluso en medio del aparente caos.
¡Espero verlos a todos en Zazenkai, el domingo!
Dana
Como monjes budistas dependemos de la generosidad de nuestra comunidad para nuestro sustento. No tenemos salario y vivimos con sencillez, por lo que cada donación es muy apreciada.
Con tu ayuda, me es posible continuar difundiendo las enseñanzas del Buda y de los Patriarcas del Zen, y compartiendo su mensaje de compasión con el mundo.
Tu donación me ayudarás a seguir ofreciendo clases de Budismo Soto Zen, Zazen y otras actividades que benefician a la comunidad. ¡Gracias por tu amabilidad y generosidad!
Zazenkai significa Meditamos Juntos, y son las reuniones semanales de una sangha Soto Zen. En Grupo Zen Ryokan nos reunimos todos los domingos, para una pequeña ceremonia, practicar Zazen juntos y aprender Budismo Soto Zen.
Si estás fuera de Guadalajara, Jalisco, puedes participar con nosotros vía Zoom en vivo, o ver la transmisión grabada en YouTube.
Si estás en la ciudad, te esperamos en el Árbol del Yoga, siempre y cuando sigas al pie de la letra las medidas de prevención por la contingencia sanitaria. Detalles aquí.
El tema del día será: Ruido interno y ruido externo es Buda.
Los espero:
Día: Domingo 6 de agosto de 2023.
Hora: Ciudad de México / Guadalajara 10:00h Caracas / La Paz 11:00h Madrid 17:00h
Por respeto al Maestro y los asistentes, LLEGAR TEMPRANO. Comenzamos a la hora en punto y se cerrará la reunión de Zoom.
Con frecuencia me preguntan si está bien usar drogas como parte de la espiritualidad budista. Mi respuesta es un rotundo y poderoso NO.
Es preocupante ver cómo el uso de drogas se ha vuelto cada vez más común en la búsqueda de experiencias espirituales, y cómo algunas personas que se autoproclaman espirituales las consumen regularmente. No están en búsqueda de la iluminación o de ser mejores personas para la vida, sino de mantener una adicción.
Si bien es cierto que algunas tradiciones chamanísticas han utilizado drogas con el pretexto de la espiritualidad, en el Budismo Zen, debemos recordar uno de nuestros preceptos fundamentales: Evito intoxicar la mente. Este precepto cobra especial relevancia en nuestra práctica Zen, ya que nuestro objeto de atención y contemplación es la realidad misma.
Para poder mirar la vida tal como es, sin distorsiones ni autoengaños, necesitamos una mente clara y libre de intoxicantes. Las drogas pueden abrir puertas momentáneas, pero también pueden nublar nuestra comprensión y nuestra capacidad de ver la realidad con claridad.
Aún peor es el hecho de que la mente intoxicada produce una versión retorcida de cómo funciona el universo. Un alucinógeno jamás dará la experiencia de luz que trae Shikantaza.
Un practicante de Zen puede mantener el estado de calma sin necesidad de ningún factor externo que no sea la disciplina que Shakyamuni nos dejó.
Usar drogas para la espiritualidad es como querer tomar un helicóptero para llegar a la cima de una montaña. El paseante puede llegar hasta allá sin esfuerzo alguno y tener la fantasía de que lo logró. Pero un montañista de verdad se construye como una mejor persona con base en el entrenamiento, en su constancia, así como en empujar sus límites.
Un paseante perezoso nunca tendrá la experiencia ni la fuerza que un montañista cultivará con el paso de los años.
El budismo no nos pide subir al helicóptero. Nos pide convertirnos en montañistas y escaladores, un día a la vez.
Todas esas experiencias artificiales que dan las drogas o el alcohol, para un practicante serio son obstáculos para vivir la naturaleza búdica que es legítima para todos los seres vivos.
El Budismo Zen nos enseña a cultivar la atención plena y la presencia en cada momento, sin huir ni evadirnos a través del uso de sustancias. La verdadera libertad y despertar provienen de enfrentar la realidad sin filtros, sin muletas artificiales.
Nuestra práctica Zen nos invita a abrazar la vida tal como es, con todos sus desafíos y maravillas, sin buscar escondernos cobardemente del presente o escapar de nuestros propios pensamientos y emociones.
Así que, no, en el Budismo Zen no utilizamos drogas como camino hacia la iluminación. En cambio, buscamos desarrollar una mente prístina y despierta que nos permita experimentar la vida plenamente, con valentía y compasión.
En la vía del Buda encontramos una libertad genuina al enfrentar la vida tal como es, sin necesidad de artificios. La mente clara y la presencia consciente son los verdaderos aliados en nuestra búsqueda espiritual y en el despertar a la verdad que yace en cada uno de nosotros.
Gracias por su cariño, dedicación y constante práctica en este camino espiritual. Es por cada uno de ustedes que esta maravillosa comunidad sigue floreciendo, y puedo continuar compartiendo la sabiduría del Buda y las enseñanzas de Dogen Zenji.
Hoy, rompemos momentáneamente la serenidad para recordarles que es momento de hacer sus contribuciones. Si bien el Buddhadharma es gratuito y se comparte con amor incondicional, las herramientas que hacen posible mi labor requieren de apoyo económico (Internet, electricidad, hospedaje web, etc.). Es por su generosidad que podemos mantener este espacio de aprendizaje y transformación.
Agradezco de antemano su valioso aporte, el cual nos permitirá seguir creciendo juntos en esta travesía espiritual. Sigamos adelante con la compasión como guía. Cada acto de generosidad es una semilla de bienestar para todos los seres.
Puede ser viá ko-fi en https://ko-fi.com/chocobuda
O pueden mandarme un correo para más opciones en choco ARROBA budismosotozen.org
El minimalismo está muy de moda. Personalidades de internet nos invitan a quedarnos sin nada y vivir en casas vacías. Pero este extremo es una práctica vacía, sin fundamentos espirituales, que termina creando confusión.
¿Sabías que la raíz del minimalismo actual se encuentra en la antigua práctica del Budismo Soto Zen?
En nuestra charla de este Zazenkai, exploraremos el concepto de minimalismo desde su origen en el Zen y cómo se ha convertido en una poderosa herramienta para encontrar la esencia de la vida en medio de la abundancia material.
Este domingo, leeremos el texto 3-7 de Shobogenzo Zuimonki, de Dogen Zenji. Nos habla sobre los votos de minimalismo en el Zen, y descubriremos cómo esta vía nos enseña a encontrar la plenitud espiritual en lo simple.
Sería ideal que leyeras el texto antes de Zazenkai. Enlace aquí.
¡Te esperamos!
Dana
Como monjes budistas dependemos de la generosidad de nuestra comunidad para nuestro sustento. No tenemos salario y vivimos con sencillez, por lo que cada donación es muy apreciada.
Con tu ayuda, me es posible continuar difundiendo las enseñanzas del Buda y de los Patriarcas del Zen, y compartiendo su mensaje de compasión con el mundo.
Tu donación me ayudarás a seguir ofreciendo clases de Budismo Soto Zen, Zazen y otras actividades que benefician a la comunidad. ¡Gracias por tu amabilidad y generosidad!
Zazenkai significa Meditamos Juntos, y son las reuniones semanales de una sangha Soto Zen. En Grupo Zen Ryokan nos reunimos todos los domingos, para una pequeña ceremonia, practicar Zazen juntos y aprender Budismo Soto Zen.
Si estás fuera de Guadalajara, Jalisco, puedes participar con nosotros vía Zoom en vivo, o ver la transmisión grabada en YouTube.
Si estás en la ciudad, te esperamos en el Árbol del Yoga, siempre y cuando sigas al pie de la letra las medidas de prevención por la contingencia sanitaria. Detalles aquí.
El tema del día será: Zen es la semilla del minimalismo.
Los espero:
Día: Domingo 30 de julio de 2023.
Hora: Ciudad de México / Guadalajara 10:00h Caracas / La Paz 11:00h Madrid 17:00h
Por respeto al Maestro y los asistentes, LLEGAR TEMPRANO. Comenzamos a la hora en punto y se cerrará la reunión de Zoom.
Cuando pensamos en budismo, sin haber investigado antes, lo que casi siempre llega a la mente la imagen del Buda, de templos, de personajes místicos o de meditación. Pero cuando comenzamos a practicar y si ponemos atención, aprendemos que los números tienen mucho qué enseñarnos en la Vía del Buda.
Hay números para las enseñanzas, para el paso del tiempo, para la arquitectura y el arte, y son importantes para nuestras ceremonias.
El número 108 es importante para nosotros. Ha sido venerado por siglos. Tanto que el mismo Master Dogen nos dejó la enseñanza esencial Las 108 Puertas del Dharma, que ya hemos estudiado en Grupo Zen Ryokan.
Pero el 108 no es exclusivo del budismo. Es parte de algo más grande dentro de la espiritualidad del mundo.
Y es que la espiritualidad a menudo está impregnada de simbolismo y significados de origen perdido en las arenas del tiempo. Los números han desempeñado un papel fundamental en diversas tradiciones religiosas y filosóficas a lo largo de la historia.
En este artículo, exploraremos la importancia del número 108 para el budismo y cómo podemos incorporar este simbolismo en nuestra práctica budista diaria.
La importancia de los números en la espiritualidad
Aunque la mente occidental desacredite la espiritualidad en los números, estos han sido objeto de fascinación y misticismo en prácticamente todas las culturas del mundo. Desde la antigüedad, los seres humanos han atribuido significados especiales a ciertos números, considerándolos sagrados o auspiciosos. Esta fascinación se deriva de la creencia de que los números pueden reflejar principios cósmicos y revelar verdades profundas sobre el universo y nuestra existencia.
En muchas tradiciones espirituales, los números son utilizados para representar conceptos abstractos o simbolizar aspectos importantes de la vida y del orden del cosmos. Los números también se emplean como herramientas para la meditación y la concentración, ayudándonos a enfocar la mente y profundizar nuestra conexión con lo divino.
Historia del número sagrado 108
El número 108 ha sido venerado en diversas culturas y tradiciones religiosas durante siglos. Tiene una presencia significativa en el hinduismo, el budismo, el jainismo, el sijismo y otras prácticas espirituales.
Para el budismo, la importancia del número 108 se ha atribuido a varias interpretaciones y significados. Una de las razones más comunes por las cuales el 108 es considerado sagrado es la idea de que representa la totalidad del universo.
(Alerta ñoña – friki budista) Esta idea se basa en la multiplicación de tres componentes esenciales: el número 3, que representa las cualidades de nuestro mundo físico (pasado, presente y futuro); el número 4, que simboliza las cuatro direcciones cardinales (norte, sur, este y oeste); y el número 12, que representa los meses del año. Si multiplicamos 3 x 4 x 12, obtenemos el número 144, que, según la tradición budista, es el número total de posibles universos. Luego, si dividimos 144 entre 4, que es el número de direcciones cardinales, obtenemos 36. Finalmente, si multiplicamos 36 por 3, que es el número de componentes esenciales, obtenemos el número 108, que representa la totalidad del universo.
Otra interpretación significativa del número 108 en el budismo proviene de la idea de que hay 108 apegos que nos atan a la rueda del sufrimiento o samsara. Según la tradición budista, el apego a las pasiones, deseos y apegos mundanos nos mantiene atrapados en el ciclo interminable de nacimiento, muerte y renacimiento. Al recitar 108 mantras o realizar 108 postraciones, por ejemplo, podemos simbólicamente liberarnos de estos apegos y avanzar hacia la liberación espiritual.
Cómo el budismo usa el número 108
El número 108 se ha incorporado en diversas prácticas budistas, lo que ha contribuido a su significado y veneración en la tradición. Algunas de las formas más comunes en las que el budismo utiliza el número 108 incluyen:
Cuentas del Mala: Un mala es un collar de cuentas utilizado en la meditación y la recitación de mantras. Un mala típico tiene 108 cuentas, lo que permite a los practicantes repetir sus mantras o plegarias 108 veces. Este acto de repetición se considera una forma poderosa de concentración y conexión espiritual con la totalidad del universo, es decir, con el Buda.
Postraciones: En algunas tradiciones budistas, los devotos realizan 108 postraciones como una forma de respeto y devoción hacia el Buda y sus enseñanzas. Esta práctica física y humilde es una expresión de reverencia y gratitud hacia el camino espiritual.
Danza ritual del Cham: En el budismo tibetano, la danza ritual cham es una forma de expresión artística y espiritual. En algunas danzas cham, los bailarines realizan 108 movimientos y gestos simbólicos para invocar la presencia de deidades y purificar la mente y el cuerpo.
Repetición de mantras y sutras: La repetición de mantras sagrados o pasajes de sutras a menudo se realiza en múltiplos de 108. Al recitar estos textos sagrados 108 veces, los practicantes buscan purificar su mente y cultivar cualidades positivas.
Peregrinaciones: En algunas peregrinaciones budistas, los devotos visitan 108 sitios sagrados o puntos de interés en un recorrido específico. Son una forma de cultivar la devoción y la conexión con la tradición budista.
Ideas para incorporar el número 108 a nuestra práctica budista diaria
Pensar en números para expresar nuestra espiritualidad parece algo muy difícil de lograr. Pero es algo que ya hacemos todo el tiempo. Por ejemplo, los minutos de Zazen al día, siempre son los mismos. Poner atención plena al 108, es retador al principio, pero engrandece tu experiencia en el budismo.
Incorporar el 108 a tu práctica espiritual, es incorporar la esencia y el orden del universo en tu vida. No te volverás a sentir en desconexión o en contra de lo que te rodea.
Existen varias formas creativas de hacerlo:
Estudia con nuestra sangha las 108 Puertas del Dharma de Dogen Zenji. Enlace.
Meditación de 108 respiraciones: Siéntate en silencio y lleva tu atención a tu respiración. Realiza 108 respiraciones conscientes, contando cada inhalación y exhalación hasta llegar a 108. Esta práctica te ayudará a cultivar la concentración y la calma.
Recitación de mantras: Elige un mantra significativo para ti y repítelo 108 veces. La repetición del mantra te ayudará a enfocar la mente y conectar con la esencia del mantra.
Movimientos conscientes: Realiza 108 movimientos conscientes y deliberados, como caminar lentamente, estirarte o hacer yoga. Al hacerlo, siente cada movimiento y sé plenamente consciente de tu cuerpo.
Actos de bondad: Cada mes realiza 108 actos de bondad y compasión hacia los demás. Puedes llevar el registro en un papel, poniendo un punto por cada acto. Esto puede incluir sonreír a extraños, ayudar a alguien en necesidad o expresar gratitud a quienes te rodean.
108 minutos de Zazen. Solo hazlo. Me agradeces después.
Conclusión
El número 108 es una poderosa representación simbólica en la tradición budista, y su significado va más allá de lo literal. A través de sus diversas interpretaciones, esta cifra nos invita a profundizar en nuestra práctica y a conectarnos con la esencia del universo y nuestra propia existencia. Ya sea a través de la repetición de mantras, la meditación consciente o la realización de postraciones, el número 108 nos ofrece una oportunidad para expandir nuestra conciencia y cultivar la comprensión de la verdad última.
Al incorporar el número 108 en nuestra práctica budista diaria, podemos experimentar una mayor conexión con la esencia del Buda y la sabiduría que yace en el corazón de todos los seres vivos. Que cada repetición, cada movimiento y cada reflexión nos lleve más cerca de la verdad última y nos permita experimentar la liberación del sufrimiento.
En la riqueza del número 108, encontramos una poderosa puerta para salir del samsara y la realización plena de nuestra naturaleza más profunda.
Si lo que escribo te es útil y te gusta, ¿por qué no invitarme un café? Gracias.
Sobre mi
¡Hola! Soy Kyonin, monje y maestro budista de la tradición Soto Zen. Formo parte de Grupo Zen Ryokan. Comparto la sabiduría eterna del Buda para ayudar a encontrar la paz interior y la liberación del sufrimiento. Juntos vamos en camino hacia la compasión.
En días de lluvia
la melancolía invade
al monje Ryokan
-Haiku de Ryokan Taigu Roshi